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Llega el x-learning, el próximo paso de la educación a distancia

El mundo entero experimentó la educación remota pero los especialistas aseguran que es hora de centrarse en la experiencia de uso, y de eso se trata este nuevo concepto.

Desde comienzos del 2020, la adaptación fue clave para poder continuar con las actividades cotidianas. En este contexto la educación no fue la excepción. Por el contrario, se logró una transformación exponencial a tal punto que muchos de estos nuevos hábitos y herramientas llegaron para quedarse.

Según el Ranking Top 10 de categorías más populares realizado por la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE) junto a Kantar TNS, el segmento de la educación, que incluye cursos, carreras y seminarios online, pasó del puesto 26 (2019) al 9 en 2020.

“Ante los cambios de hábitos que vivimos de consumo online, la educación tradicional también se reinventó. El e-learning pasó de ser una opción a una necesidad. Las escuelas, universidades, centros educativos y de formación se suman a esta nueva modalidad que se beneficia de las ventajas que nos da la tecnología”, explica Valeria Ferreyra, directora de Educación en CACE.

Luego de esa transformación, hoy la educación se enfrenta a un nuevo desafío: modificar la metodología de enseñanza para adecuarse a las nuevas generaciones de estudiantes que son más inquietas y tienen más acceso a la información. Una de las claves es crear contenidos atractivos que aumenten la motivación y el compromiso de los alumnos, valiéndose de herramientas tecnológicas.

Frente a este contexto ya comenzó a hablarse de x-learning, que es la evolución del e-learning. Se trata del aprendizaje a través de la experiencia. “Es una nueva y mejorada versión digital, de la tradición constructivista del aprendizaje experiencial de Dewey, Piaget y Kolb. Se trata de aprender mediante experiencias híbridas que mariden la presencialidad con la colaboración en línea”, resume Alejandro Artopoulos sociólogo, profesor y director de investigación y desarrollo del Centro de Innovación Pedagógica en Universidad de San Andrés. Según Artopoulos, el aprendizaje reflexivo sobre el saber-hacer se basa en la simetría entre el pensamiento concreto y el pensamiento abstracto que se resume en la frase de Seymour Papert, pedagogo pionero de la educación digital: "No podés pensar en pensar, sin pensar en pensar sobre algo que probaste hacer".

El e-learning nació, fundamentalmente, centrado en la tecnología o “tecnocentrado”, con el objetivo de que la tecnología garantice la continuidad pedagógica de la transmisión de contenidos mediante la modalidad virtual, primero con entornos virtuales y, luego, con videoconferencias.

“Se ha comprobado que el aprendizaje a través de la experiencia es un método mucho más efectivo que las técnicas tradicionales, como la lectura o las clases en un aula. Hay mejor retención de conceptos, mayor velocidad del aprendizaje y mayor efectividad en la puesta en práctica de las lecciones”, asegura Carlos Villalpando, director de marketing en Smartraining México.

Casos mundiales

Poniendo el foco justamente en el estudiante, están surgiendo innovadoras propuestas educativas. Han aparecido, en los últimos años, instituciones que proponen una formación acelerada e intensiva para determinados puestos o especialidades que no se llega a cubrir con la oferta existente.

En América Latina, es un paradigma que recién está empezando a tomar impulso. “Los pilotos de avión han utilizado simuladores para aprender desde hace décadas, pero ahora esta tecnología ha ido permeando a otras disciplinas. Quizás el ejemplo más claro son las escuelas de medicina de algunas de las universidades más importantes del continente como el DUOC, en Chile, y el Tec de Monterrey, en México. Estas instituciones han implementado soluciones de realidad virtual para formar alumnos de carreras de la salud. Esto se volvió especialmente relevante con la pandemia porque los estudiantes pudieron cumplir con las prácticas clínicas gracias a estas soluciones”, cuenta Villalpando.

También están creciendo plataformas de microformación como Akademus, que propone aprender a través de videos. Se vale del microlearning, un formato educativo de pequeños contenidos con temarios menos extensos que los masters o posgrados. Además, incluye un calendario más flexible para acceder a los cursos cuando el alumno quiera. Lo más novedoso de Akademus es la forma de consumir micro-formación, que permite comprar cursos sueltos o suscribirse a una tarifa plana. Otro gran ejemplo de aprendizaje online es Domestika, una comunidad creativa que experimenta un gran crecimiento. En esta plataforma varios expertos comparten sus conocimientos y transmiten sus habilidades a través de cursos online producidos profesionalmente. Hoy en día, esta comunidad tiene más de 6 millones de personas.

Por último, podemos mencionar a las escuelas nativas digitales online, como IEBS, con una oferta académica que no cubren las universidades centradas en el mundo digital. Esta escuela de negocios, fundada en 2009 como una alternativa a las universidades tradicionales, plantea un modelo de escuela ágil y moderna. IEBS surgió en el seno de la innovación y el emprendimiento en España de la mano de Seedrocket, la primera aceleradora de startups española, que cuenta con Google como uno de sus principales partners.

Panorama actual y futuro

Según Villalpando, el rezago educativo en Latinoamérica es preocupante, y solo se agudizó con la llegada de la pandemia de COVID-19. Invertir en educación de alto nivel no es solo algo deseable para las instituciones y los gobiernos de la región sino una necesidad absoluta para mantenerse competitivos en el panorama global. “Desafortunadamente, otras regiones tienen ventajas en la implementación de tecnologías en la educación, pero con soluciones cada vez más accesibles y un mundo casi completamente interconectado, las excusas se van acabando. El momento de invertir en esto es ahora. Mañana llegaremos tarde”, destaca el ejecutivo.

En relación con las nuevas herramientas tecnológicas, algunas de las tendencias que vienen son el uso de sistemas Learning Managment System (LMS), plataforma de e-learning; y el uso de recursos virtuales básicos, como el video learning y las microcápsulas formativas. Asimismo, otras tecnologías han ganado terreno como la Realidad Virtual, Inteligencia Artificial y Learning Analytics. “Todas estas tecnologías permiten una experiencia formativa mucho más rica y, sobre todo, de mayor calidad”, señala el ejecutivo de Smartraining México.

Es claro que los modelos educativos deben cambiar en los próximos años para adaptarse a las nuevas generaciones de alumnos que son más impacientes y poseen toda la información a un clic de distancia. El desafío es, ahora, ubicar a los alumnos en el centro del aprendizaje.

Cintia Perazo

Cintia es licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad del Salvador y Guionista del ISER. Trabajó como redactora, editora y colaboradora en distintos medios gráficos nacionales e internacionales. Hace más de 15 años, escribe en el diario La Nación y además, colabora en diversas publicaciones entre las que se destaca el diario El Cronista, Infotechnology y América Economía... Ver más

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